Hace tiempo que comparto en Instagram algunas de las ilustraciones que hago en acuarela. Y no hay vez que no salte alguna pregunta sobre qué acuarelas recomiendo para empezar, o qué papeles uso o que dónde he aprendido a pintar. Este blog empezó con otros menesteres, pero tras muchos comentarios y peticiones, voy a contarles mi experiencia y los misterios de EMPEZAR a pintar con acuarela. 

Mi historia es larga, no crean que todo esto ha sido algo fortuito, pero sin duda la práctica hace al maestro y como dicen los maestros, como más se mejora es practicando mucho. Es cierto que para que las cosas salgan bien, hay que tener algo de sensibilidad y fijarse mucho, en la naturaleza, en los colores. Soy de la opinión de que, las cosas que combinan naturalmente son las que estamos acostumbrados a ver con los ojos. Lo cierto es que mi madre dice que todo empezó desde bien pequeña, cuando le escribía cuentos a mi hermana y le hacía dibujos. Más o menos lo que viene siendo este blog. También recuerdo, que lo me más me gustaba que me enseñara de todo lo que tenía guardado por casa, eran sus cuadernos de dibujo. ¡Ella sí que dibujaba bien! A mi abuelo también le gustaban mucho las manualidades y mi tía abuela, Victoria, tenía afición por el óleo…no sé cuántas horas habré pasado mirando su cajita metálica con los tubos de colores.

La suerte me llegó cuando además de mi madre, el entorno familiar más cercano vio que allí había realmente una pasión y algo en lo que podía destacar y convencieron a mis padres para apuntarme a clases de pintura en una de las academias más reconocidas de Valencia, Barreira. Allí íbamos cada sábado por la mañana durante varios años. Si alguno que me lee tiene hijos, espero que lo sigan haciendo porque a mí me resultaba muy divertido. Por desgracia, eran pocas horas a la semana y nos centraban mucho en copiar fotos o dibujos y sobre todo pintar con témperas (ahora llamados gouache) y óleos. Todavía recuerdo con horror aquel olor a aguarrás y la combinación explosiva cuando se mezclaba con el agua de la pila al lavar los pinceles. La acuarela fue una técnica que se quedó en el tintero, pues la utilicé poco pero, siempre me llamó la atención. Cuando el BUP y COU empezaron a ponerse serios y había que dedicar el fin de semana a estudiar, decidí que ya no iba a continuar yendo a las clases, que cada vez me aportaban menos, y que ya practicaría en casa. Y así ha sido. A veces más, a veces menos, pero los que me conocen me habrán visto alguna vez con un pincel en la mano.

Cuando empecé a trabajar en la Escuela dando clases teóricas relacionadas con mi carrera (de ciencias), coincidí con otro maestro, del que ya les hablé aquí, que tenía por hobby la acuarela. Cada año nos regalaba una postal por Navidad hecha con aquellos colores aguados. Yo anhelaba mucho volver a tocar los pinceles y probar esta técnica. Así, me interesé por acompañarle a alguna de sus actuaciones al natural y por apuntarme a algún curso y volver a explorar. Doy gracias al boom de los talleres creativos, conociendo a Raquel de Gusososland, que impartía clases cortas y presenciales en Valencia, con la que volví a romper muñeca. Aquí tienen un post donde describí la experiencia en sus clases. Después, he ido realizando cursos online en domestika, como el de Ana Victoria Calderón o el recientemente realizado con Ana Santos (me encantó). Me parecen dos cursos básicos y complementarios para empezar.

Entre mis referencias y a los que considero magos de las acuarelas están Esther Gili y Adilson Farias, pero como ya he comentado en el blog en varias ocasiones, me gustan muchos ilustradores diversos como Eva Carot, Dinara Mirtalipova, Iraville, Maggie Cole, Lorna Scobie, Vicky_od, Oana Befort, Maya Hanisch, Le Lapain o Vivian Mineker, entre tantos que seguro se me olvidan.

Y, ¿por dónde empezar?

MATERIALES.  Los materiales básicos son:

• Papel acuarela, aquí es donde hay que hacer la inversión. A mí me habían dicho que cualquier papel para empezar y romper mano era válido, pero de verdad pienso que el papel es casi lo más importante. Un mal papel puede arruinarte el dibujo y llegar a pensar que no tienes mano para esto. He probado muchos y ahora mismo me quedo con el Molin du Roy de Canson, para el tipo de dibujo que estoy haciendo. En general, me gustan los de grano fino y que tengan bastante algodón. Para romper mano y no dejarse mucho dinero les recomendaría el “block acuarela” de Guarro, de 240 g que ven en la foto. 

Pinceles, serían necesarios unos cuantos, de varias numeraciones: 0, 1, 2, 4, 6 y 8. Conozco los de la marca escoda y están muy bien, pero seguro que hay otras.  Yo los uso de punta redonda. También tengo uno fetiche de pelo natural de marta (se nota la diferencia al agarrar el agua, pero lo dejaría para nivel más avanzado).

Acuarelas, yo las uso en pastilla, pero las tienen en tubo, líquidas (vienen bien para empezar), y en cientos de nuevas versiones (rotuladores, lápices, ceras…). Les recomendaría que empezaran con una cajita básica de 15 colores de la marca Van Gogh. Más adelante pueden pasar a más calidad. Yo utilizo mucho también las gansai de kuretake, por su variedad de colores, aunque compré la caja grande en Japón, una ganga.

Paleta, para mezclar los colores. La acuarela nunca se aplica desde la pastilla, hay que diluirla siempre y para ello necesitaremos algún recipiente de “pocillos”. Algunos estuches como el anterior llevan esta paleta incorporada, pero siempre se queda pequeña cuando queremos sacar muchos colores diferentes, así que no está de más. 

Agua, qué decir, es el ingrediente base. Siempre dos botes, uno con agua limpia y otro para ir retirando el exceso de pintura. Ya verán como se va “enguarrando” y que hay que cambiarla periódicamente.

Papel o trapos, para secar los pinceles y retirar excesos de pintura. Lo ideal es papel de cocina o algún trapo que no deje “pelo, pelusa o polvo”.

Lápices, necesitarán marcarse el dibujo que vayan a realizar. Para ello les recomiendo utilizar un lápiz duro, que luego se vaya a ver poco en el papel. Un 3H, puede ser adecuado. Una vez se moja el lápiz es casi imposible de borrar, y además debido a la cantidad de algodón que lleva el papel, friccionar la goma sobre él puede dañarlo. Sean cuidadosos.

FORMACIÓN E IDEAS. Sin duda, para poder empezar hay que formarse. Yo que me dedico al mundo de la formación en otros campos, lo considero básico. Entiendo que la gente ve cosas y quiere tener rápido el resultado, pero si han visto alguna película de Karate Kit ya sabrán lo que significa el “dar cela, pulir cela”. Siempre hay algo que aprender de los demás. Lo ideal sería acudir a alguna academia de Bellas Artes cercana y empezar por dibujo básico para ir pasando a técnicas. Si no es el caso, sin duda recomiendo los cursos de Ana Santos en domestika o incluso el de Ana Victoria Calderon, allí tienen muchos ejercicios y muchos “paso a paso” para poder ir afrontando algún proyecto. A mí me han servido, aunque ya he explicado que tengo mi base y no soy capaz de discernir si alguien sin ningún tipo de conocimiento pueda captarlo todo, creo que sí. Pueden probar porque la inversión también es pequeña. Hay más escuelas, pero no he hecho cursos de acuarela en ellos y no sabría decirles.

También pueden empezar viendo videos en youtube. Yo he pasado muchas horas observado a otros pintar. Simplemente mirando, algo va quedando. Aquí les dejo unos cuantos enlaces muy interesantes!

Y sobre todo disfruten, que al final es lo que hace que los resultados sean verdaderamente buenos. Con la práctica todo se consigue. Espero les haya servido y les leo en los comentarios.

Siempre suya,

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Mrs. Maple.

P.D. Les recuerdo que hasta el día 6 de enero estamos de sorteo, en la entrada anterior del blog. Cumplan bien las condiciones. Suerte!